Y sé que aunque ha pasado tanto tiempo, y cada uno tiene su vida hecha en otro lugar no puedo soltar una tonelada de recuerdos que vienen a mi mente una y otra vez. Todos a la vez chocando conmigo mismo.
Fotos que guardé en mi memoria para cuando no te podía ver algún que otro día se presentan a diario porque en realidad esos días se hicieron años. Porque nunca creí que iba a estar en el medio de la noche extrañándote y escribiendo esto luego de tanto tiempo. Y no sé muy bien si te extraño a vos o extraño los momentos que tuvimos. No lo sé.
Tal vez sólo es una estupidez escribir esto, no quiero llevar a nada, sólo sacarme este peso de encima que tengo conmigo. Y aunque me llamaste una cantidad de veces y ninguna de ellas atendí (y no lo haría) recuerdo absolutamente cada detalle de cada momento que tuvimos. Los recuerdo uno por uno. Absolutamente todos.
Y aunque pase el tiempo y yo siga intentando darme cuenta de qué es lo que tengo que hacer para poder sentirme bien conmigo mismo y poder por fin conocer a una persona y entregarme... recuerdo las primeras veces que nos vimos, nuestras primeras semanas y cómo saltaba a vos para abrazarte y sentirme querido como nunca antes me había sentido.
Tal vez vos no recuerdes esto de la misma manera en la que lo hago y sinceramente no quiero saberlo. Sé que estas mucho mejor sin mi, y yo estoy mucho mejor que vos (tenemos que admitirlo) pero recuerdo cada momento que pasamos y todos los sueños que tuve con vos. Y no encuentro a nadie que me haga sentir de la misma manera aunque intente e intente una y otra vez.
El clima cambia, comienza el frío y luego llega el calor... todos estos estados los sentí estando con vos. Recuerdo que nos prometimos estar por siempre juntos, y a veces me pregunto si en verdad yo era muy chico para entender la dimensión de eso, o realmente yo lo sentía de esa manera. Y en realidad lo único verdadero de todo eso es que al menos sigo teniéndote en mi mente como te lo prometí.
Las horas pasan y sólo quiero estar solo. Mis amigos me llaman y vienen a verme, sin saber nada, y me seco las lágrimas y no les digo absolutamente nada porque prometí estar bien y porque luego de tanto tiempo no tiene sentido contar mis sentimientos hacia vos.
Pero, ¿qué se hace cuando se te caen las lágrimas frente a la persona que estas conociendo? ¿Y qué se siente cuando todo lo que quisiste ser en algún momento se quemó como todas las cartas que alguna vez te hice y seguramente quemaste? Tal vez recuerdes mi cuerpo dando vueltas en la cama y de alguna manera incorporándose al tuyo para recibir un abrazo.
Tal vez este es el momento para darme cuenta que mi promesa fue verdadera... yo quería un por siempre.
Ramiro
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